El diputado (RN) Bernardo Berger elogió la aprobación en la Cámara Baja del proyecto de ley que aumenta las sanciones a conductores ebrios que causen lesiones graves o de muerte.
La propuesta, conocida como "Ley Emilia", eleva el nivel máximo de la pena en el caso que se ocasionen lesiones graves o gravísimas o la muerte, de modo que los victimarios pueden obtener presidio de 3 años y 1 día hasta 10 años.
Además, establece un aumento de la pena si el conductor huye del lugar sin prestar asistencia, por reincidencia o en el caso de un conductor profesional, circunstancias que fijarán un rango de presidio de entre 5 años y 1 día a 10 años.
Según explicó Berger, el proyecto ahora quedó en condiciones de ser promulgado por el Ejecutivo como ley en los próximos días, y una vez vigente, "será una herramienta legal importante que ayudará a poner freno a la pérdida de vidas humanas causadas por conductores ebrios y que desgraciadamente en nuestro país presenta altas tasas de incidencia"".
Añadió que con la Ley Emilia "estamos dando una potente señal de castigo a aquellos conductores que cometen este crimen y que hasta ahora quedaban impunes y circulando nuevamente por las calles".
No obstante, el parlamentario señaló que la ley es sólo una parte para combatir las muertes por accidentes de tránsito por ingesta de alcohol, y sostuvo que es necesario profundizar en la educación ciudadana en la materia, así como en perfeccionar las exigencias que hoy permiten que una persona obtenga y mantenga una licencia de conducir.
Edición 329